
xAI elude regulaciones ambientales con turbinas de gas no autorizadas
El uso de turbinas de gas móviles por xAI, la startup de inteligencia artificial de Elon Musk, en Memphis genera controversia por su impacto ambiental y falta de permisos.

En Memphis, Tennessee, la empresa de inteligencia artificial xAI, liderada por Elon Musk, ha recurrido a turbinas de gas natural móviles para alimentar su nuevo centro de datos, Colossus. Estas unidades, diseñadas como solución de emergencia, han sido utilizadas de manera permanente, generando no solo energía, sino también contaminantes como óxido nitroso y formaldehído. Sin embargo, su operación no contó con los permisos ambientales necesarios, lo que ha despertado críticas de activistas y expertos.
El abogado Patrick Anderson, del Southern Environmental Law Center, alertó al Departamento de Salud del Condado de Shelby sobre la falta de autorización para las turbinas. A pesar de ello, xAI no respondió a las solicitudes de comentarios, y no fue hasta enero de 2025 que su empresa hermana, CTC Property LLC, presentó una solicitud formal para regularizar el uso de las turbinas ya instaladas y agregar 11 más. Este aumento proporcionaría 150 MW adicionales, suficiente para abastecer a casi 100,000 hogares.
Aunque las turbinas móviles son una solución rápida y económica, su eficiencia energética es baja, con pérdidas de hasta un 50%. Además, emiten niveles significativos de contaminantes, lo que las convierte en una opción poco sostenible. Daniel Cohan, profesor de ingeniería ambiental en la Universidad Rice, calificó este enfoque como "rápido y sucio", destacando su alto costo financiero y ambiental.
La situación se complica con la expansión de xAI en Memphis, donde planea instalar más turbinas en el barrio de Whitehaven, una zona ya afectada por la contaminación industrial. La posible adición de 15 turbinas más podría elevar las emisiones de formaldehído a niveles críticos, lo que desencadenaría una mayor regulación bajo la Ley de Aire Limpio. Anderson describió esta demanda energética como "sin precedentes" y criticó el enfoque de xAI por su falta de transparencia y respeto hacia la comunidad local.
Mientras tanto, empresas como APR Energy y Solaris Energy Infrastructure aprovechan la creciente demanda de turbinas móviles, alquilándolas a compañías tecnológicas en expansión. Aunque estas soluciones temporales son atractivas para la industria de la IA, su impacto ambiental y la falta de regulación adecuada plantean serias preocupaciones para el futuro sostenible de la región.
