1 de cada 3 personas sigue trabajando después de los 65 años en Latinoamérica
De acuerdo con un informe de la Organización Internacional de Trabajo, esto revela una problemática económica latente en la región.
En la región de Latinoamérica y el Caribe, la realidad laboral de los adultos mayores de 65 años presenta desafíos significativos, revela un informe reciente de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Contrario a la tendencia en los países desarrollados, donde alcanzar la edad adulta suele asociarse con el descanso, aproximadamente uno de cada tres adultos mayores aún se encuentra en el mercado laboral.
La tasa de participación laboral de mayores de 65 años en Latinoamérica se mantiene cerca del 30% en las últimas tres décadas, siendo notablemente superior al 11.9% registrado en los países de altos ingresos de la OCDE. Entre las razones que impulsan a los adultos mayores a permanecer activos, se señalan las condiciones económicas y los ingresos insuficientes provenientes de pensiones. El deterioro en la cobertura de protección social deja al 34.5% de los mayores de 65 sin ingresos laborales ni pensiones.
En países andinos como Bolivia y Perú, la alta participación laboral de adultos mayores se asocia con la presencia significativa de población rural. La informalidad y el subempleo también contribuyen a esta realidad, llegando al 48.5% de participación en Perú. Las nuevas olas migratorias y la falta de un sistema de pensiones adecuado acentúan el fenómeno.
En términos económicos, la persistencia laboral de adultos mayores afecta la tasa de recambio en el sistema pensional, como se evidencia en el caso de Bolivia. La urgencia de abordar esta realidad se vislumbra como un imperativo para garantizar el bienestar económico de la población en la región.