El nearshoring genera oportunidades y retos para México en 2025
La llegada de nuevas empresas extranjeras impulsadas por el nearshoring en México, plantea ventajas, pero también desafíos.
El fenómeno del nearshoring continúa fortaleciéndose en México, proyectándose que para 2025, alrededor de 400 nuevas empresas extranjeras se establecerán en el país de acuerdo con un informe de BBVA y la Asociación Mexicana de Parques Industriales Privados (AMPIP). Este crecimiento es impulsado por la búsqueda de empresas de reducir su dependencia de China y aprovechar la cercanía con el mercado estadounidense.
Entre 2021 y 2023, el número de empresas en México experimentó un incremento del 14%, y se anticipa que esta tendencia ascendente continuará en los próximos años. El Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) ha sido fundamental en este contexto, funcionando como un pilar para atraer inversión y fomentar un ambiente propicio para la expansión empresarial. La relocalización de industrias no solo aporta oportunidades económicas, sino que también contribuye a la resiliencia de las cadenas de suministro.
El nearshoring también tiene un impacto notable en el mercado laboral mexicano, especialmente en los sectores de manufactura y logística. Según el estudio, el 37% de las nuevas empresas que llegarán a México están vinculadas a la manufactura, y el 36% se centrarán en transporte y almacenamiento. Asimismo, se espera que la participación de empresas chinas en los parques industriales aumente del 4% al 6% para 2025, lo que subraya la creciente atracción de México para inversionistas extranjeros.
No obstante, el crecimiento del nearshoring no está exento de desafíos. La infraestructura y el suministro energético son áreas críticas que requieren atención inmediata. En particular, el norte de México enfrenta problemas significativos de energía y agua. Datos de la AMPIP revelan que el 39% de los inconvenientes reportados por las empresas en esta región se deben a la falta de suministro eléctrico, mientras que el 21% está relacionado con la escasez de agua. Estos retos deben ser abordados para garantizar un ambiente favorable para el nuevo flujo de inversiones.
El nearshoring representa una oportunidad invaluable para el desarrollo económico de México. Sin embargo, para maximizar los beneficios de esta tendencia, el país deberá afrontar y resolver sus desafíos estructurales. La capacidad del gobierno para invertir en infraestructura y proporcionar un entorno propicio para los negocios será determinante para asegurar el éxito de este fenómeno en los años venideros.