Movilex, la empresa familiar extremeña que factura más de 32 millones de euros con la gestión de residuos
Los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) son uno de los flujos de desechos de más rápido crecimiento en la UE y, según el Programa para el Medio Ambiente de las Naciones Unidas, se generan cerca de 50 millones de toneladas de desechos electrónicas al año, de los cuales se recicla menos del 40%
Los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) son uno de los flujos de desechos de más rápido crecimiento en la UE. Según el Programa para el Medio Ambiente de las Naciones Unidas, se generan cerca de 50 millones de toneladas de desechos electrónicas al año y se recicla menos del 40% de los mismos. En 2020 se recogieron 10,3 kilos de RAEE por habitante en la UE.
Estos residuos se han convertido en un obstáculo para los esfuerzos de la UE por reducir su huella ecológica. Ante esta situación, empresas especializadas en la gestión de residuos como Movilex se han convertido en una solución para cumplir con el 85% de reciclaje que exige la normativa a las compañías.
Movilex es una empresa familiar situada en el municipio de Lobón (Badajoz) cuyos orígenes se remontan a la producción y exportación de espárrago blanco. En 2006 la compañía inició un proceso de diversificación tras percatarse de la importancia que estaba cobrando el medioambiente en el desarrollo de las empresas y, en 2009, se constituye como empresa especializada en la gestión de residuos peligrosos y no peligrosos de aparatos eléctricos y electrónicos y operadora de materias primas secundarias.
La compañía cuenta con más de 13 años de trayectoria, 147 empleados, más de 2.000 clientes, 7 plantas repartidas por el territorio nacional, presencia también en Portugal, Urugay y Panamá y facturó más de 32 millones de euros en el último año.
Hasta la fecha, ha conseguido gestionar más de 490.000 toneladas de residuos y ha llevado a cabo grandes proyectos como la gestión integral de los residuos generados en la obra de ampliación de exclusas del Canal de Panamá o los trabajos de reflote, traslado y desguace de más de 50 embarcaciones en el cementerio de buques que deben ser retiradas por la ampliación y mejora del Puerto de Montevideo.
Luis García Torremocha, presidente y consejero delegado de Movilex, señala que "nuestro objetivo es proteger y preservar el medio ambiente a través de un reciclaje eficaz y sostenible de los residuos generados en la sociedad, asegurando el equilibrio del sistema tanto a nivel medioambiental como económico. Por ello, nuestro principal reto es aumentar los niveles de reciclaje en España y poner en valor la reutilización de los productos refinados porque es una forma de concederles una nueva vida útil, al tiempo que concienciamos a la población sobre los beneficios de la economía circular".
Economía circular y producción inversa: las claves de su éxito
El modelo de negocio de Movilex se basa en ser un operador de la minería urbana dentro de la economía circular: promueven el uso de los recursos procedentes de elementos al final de su vida útil y recuperan su presencia en la cadena de producción. De esta manera, no solo son generadores de riqueza, sino que, además, contribuyen a la conservación del entorno natural.
La compañía se basa en modelos de producción inversa, desarrollando las actividades bajo un sistema innovador de recogida, descontaminación y valorización de los residuos centrado en la trazabilidad controlada desde el proveedor del residuo hasta el cliente final. Actualmente, cuenta con dos líneas de negocio principales:
• RAEE: se ocupan de la recogida de residuos eléctricos y electrónicos tanto peligrosos como no peligrosos que generan las empresas. El servicio se documenta convenientemente para conocer la trazabilidad en todo momento y cumplir escrupulosamente con los requerimientos legislativos.
Para este servicio, cuentan con un equipo de 15 profesionales de la logística y con una red de acuerdos que les permiten llegar a todos los puntos del estado. Dentro de la estructura logística, destaca la amplia red de Centros de Almacenamientos Temporales (CAT) con los que cuentan, al igual que plantas de tratamiento. En estas últimas, han desarrollado líneas productivas, con procesos y procedimientos que garantizan el tratamiento integral de los residuos autorizados (férrico fragmentado, aluminio y plástico fragmentado), de los cuales generan materias primas como cobre, aluminio, plástico y hierro que dan lugar a equipos nuevos.
• Refinería: esta línea de negocio se basa en el procesamiento de Metales Preciosos y no Ferrosos extraídos de residuos como placas electrónicas, cables y radiadores que convierten en nuevas materias primas con mayor pureza (oro, plata, cobre y paladio) a través de la valorización de los mismos, consiguiendo así metales de mejor calidad, para posteriormente devolverles su vida útil y darles un nuevo uso.
Esta actividad, basada en la economía circular, tiene un gran impacto económico y medioambiental: estos metales preciosos son un recurso limitado, pero pueden reutilizarse para la fabricación de nuevos productos, lo que supone una reducción en los costos de fabricación al tiempo que se evita la sobreexplotación y el impacto ambiental de la minería.
A mayores, la compañía ofrece otros servicios basados en necesidades específicas como el desmantelamiento de instalaciones; desinstalaciones técnicas; servicios paralelos de testeo, toma de números de serie y remarketing, recuperación de piezas y componentes; y destrucción física de soportes digitales conteniendo información clasificada.