¿Ha fracaso el Metaverso en el mundo empresarial?
Aunque el metaverso prometía cambiarlo todo, desafíos como la falta de descentralización y la desconfianza hacia los NFT amenazan su futuro.
Plataformas como Meta prometían una revolución en los negocios, proyectando el metaverso como la siguiente frontera inevitable de la evolución de internet. Sin embargo, hoy nos encontramos ante un escenario en el que las empresas parecen más enfocadas en explotar la inteligencia artificial que en sumergirse en mundos virtuales.
La narrativa corporativa liderada por empresas como Meta auguraba una nueva era de inmersión digital. Sin embargo, las estadísticas actuales revelan un desinterés generalizado: el 68% de los estadounidenses no muestra interés en la visión 'Meta' de Zuckerberg, y el 85% de la Generación Z se muestra indiferente a la presencia empresarial en el metaverso. Entonces, ¿fue Meta un fracaso empresarial?
Uno de los elementos cruciales del metaverso es su falta de descentralización. Aunque se esperaba un ecosistema comunitario, la realidad actual muestra que la mayoría de los metaversos actuales son controlados por equipos centralizados, generando desconfianza. Además, las interfaces poco amigables y la falta de accesibilidad actúan como barreras significativas para la adopción masiva.
Otro desafío es la ausencia de economías estables en el mundo virtual. Aunque se proyecta que el mercado del metaverso alcance los 800,000 millones de dólares para 2024, la falta de un modelo económico sólido dificulta a las empresas encontrar un retorno de la inversión. La inclusión de NFT también genera desconfianza, percibiéndose más como una táctica de monetización que como una forma auténtica de otorgar propiedad digital.